martes, 23 de febrero de 2010

"La Nación" mete presión sobre la justicia.

Bitácora del ciudadano de a pie. El "partido judicial".


La única forma de negar la existencia de la categoría política
partido judicial es impedir que los jueces fallen en cuestiones políticas.




Así como en su momento La Nación anticipó el fallo de una jueza del palo, el fallo de la jueza Sarmiento respecto a las reservas del BCRA y el DNU del Fondo del Bicentenario; así ahora, que parece que la cámara de alzada que debe resolver una apelación no está formada por jueces del palo, meten presión sobre esos jueces.

Ayer, Morales Solá fue brutalmente claro: si la sala IV en lo Contencioso Administrativo falla a favor del Gobierno, "será un escándalo" (sic). Y si no, será, simplemente una derrota para el Gobierno. O sea, en este caso, será justicia.

Y hoy, el especialista de La Nación en Tribunales, Adrián Ventura, les pone a los camaristas, los jueces, Sergio Fernández, Luis Márquez y Jorge Morán, el diario en sus mesas de desayuno diciéndoles por qué deben fallar como La Nación quiere que fallen.

El mensaje es claro: La Nación le dice a los jueces: Luego de la NeoLibertadora, ustedes irán al tacho de los desechos judiciales si no se portan bien. Así que, a portarse bien con el sistema.

Si la Sala IV dictase un fallo favorable al Gobierno, colocaría a la Corte en una situación extremadamente incómoda. El alto tribunal, que siempre hace gala de independencia, no podría tolerar un fallo amañado de la Sala IV que, de un plumazo, dejase sin efecto dos medidas cautelares concordantes. Por el contrario, si el fallo mantuviese la indisponibilidad de las reservas, el tema podría ser resuelto por el Congreso.

Fuente: Adrián Ventura y La Nación le meten presión a la Justicia.




La cosa está clara: Todo se reduce a si el juez o los jueces es o son del palo. La jueza Sarmiento es del palo. La jueza Pura Arrabal es del palo. Los camaristas Sergio Fernández, Luis Márquez y Jorge Morán no son del palo. Para aquéllos, gloria y laudes. Para éstos: recusaciones y advertencias.

Este simple hecho de ser un juez del palo o no ser del palo de algún sector político, ideológico o económico inhabilita al Sistema Judicial para tratar temas políticos. Al menos, claro, que los jueces puedan ser elegidos por el voto popular. Pero como esto último no sucede ni sucederá, entonces el Sistema Judicial debería abstenerse de tratar temas políticos, limitándose a establecer la constitucionalidad o falta de constitucionalidad de una norma jurídica, como lo manda la CN. Para la ciudadanía de a pie, un conjunto de jueces del palo hacen un partido judicial. Del palo que sean.


Alfredo Arri

0o0

No hay comentarios:

Publicar un comentario