sábado, 14 de agosto de 2010

Florencia Peña y los pañales descartables.

Derechos humanos. Libertad de expresión.

La insoportable hipocresía

de l@s católic@s preconciliares.


Florencia Peña
ha sido objeto de una campaña en contra de su persona a raíz de haberse manifestado a favor de la despenalización del aborto. Dicen que en Internet pulula una movida para que los empresarios que la tienen conchabada para vender pañales descartables a través de spots publicitarios para tevé le retiren ese contrato. Arguyen est@s pelotud@s , por supuesto, que la actriz ofende a la maternidad.

Como la movida purificadora está íntimamente relacionada a militantes de un catolicismo a ultranza, las ignorantes mujeres que la boicotean caen en una evidente contradicción. En efecto: estas señoras deberían estar en contra de los pañales descartables en general, y no contra los que vende Flor.

La razón es sencilla: siendo todas ellas señoras católicas anteriores al Concilio Vaticano II, deberían aborrecer a todo pañal descartable, ya que el ideal mariano de la religión exige de la mujer el sacrificio en aras a la buena economía del hogar que sostiene el hombre (al que debe obediencia). Las señoras católicas preconciliares deberían lavar los pañales de algodón al pie del piletón, en la vieja tabla de lavar, para mortificación de la carne, la cual es siempre, como se sabe, purificadora.

Sigan abort... Perdón: sigan participando, seoras.

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